23.04.2014 18:37
El ambiente en el Calderón preveía un gran partido, de esos épicos que no se le olvidan a uno. Semis de Champions cuarenta años después, con Torres levantando pasiones y Mourinho que se volvía a ver con la afición colchonera.
Pues bien, no podemos decir que viviéramos un bonito duelo, y gran parte de la culpa la tuvo el hombre que solo habla inglés porque entrena un club de ese país. Desde que la alineación del equipo londinense se hiciera pública se vio las intenciones de Mou. Cech, Azpilicueta,Terry, Cahill, Cole, Mikel, David Luiz, Lampard, Ramires, Willian y Torres. Se podía anticipar cómo iba a jugar el Chelsea. Y estas anticipaciones no fueron erróneas. El portugués sacó a 10 hombres a defender y a Nando (como le llaman en Londres) a pelearse con los defensas atléticos y, por cierto, firmó un gran partido creando peligro en cada balón que tocaba.
Durante el partido la posesión fue del Atlético (70-30) y las ocasiones también (25 disparos del Atleti por 5 del Chelsea). Los visitantes se encerraron atrás durante todo el partido buscando a base de balonazos sin sentido a un Fernando Torres que se le veía con ganas ante su regreso a casa. El Calderón le dedicó una bonita ovación al principio y al final del partido.
Al Atlético se le vio con ganas, fue a por la victoria pero se vio incapaz de superar el muro que se encontró en frente. La verdad es que al final a Mou le hubiera dado igual que jugara o no Courtois. Lo peor es la baja del capitán Gabi para el próximo partido.
Vayamos al planteamiento del portugués, el de juntarse 10 hombres en el área regalándole el balón al Atleti. Es un crimen contra el espectáculo, y más en una semifinal de Champions. Ya no solo el hecho de defender durante todo el partido, sino las pérdidas de tiempo continuas que hacían que te dieras cuenta de que solo había un equipo que quería ganar y vestía de rojo y blanco. Pero aunque vaya en contra de la belleza, lo estético o lo socialmente aceptado, dio sus frutos. Y esto es elogiable, porque no es nada fácil meterse en el Calderón a defender un 0-0, y si lo fuera, el Atleti no sería líder de la liga. Mourinho consiguió exactamente lo que quería, el empate sin goles (algo que yo no entiendo, porque les obliga a igualar este resultado o ganar en el partido de vuelta).
Muchos le critican, otros tantos dicen que dio un recital técnico, pero lo que sabemos es que consiguió lo que quería.
