30.03.2014 21:55
Líderes por sorpresa. La película más famosa del panorama futbolístico. La protagonizan dos equipos unidos por una extraña relación de amor: el Liverpool y el Atleti. Muy del rojo fuego, su llama prendió con el traspaso de Torres a los "reds", inexplicablemente. Se citaron en la antigua y ajada UEFA con victorias colchoneras, en las que se respiraba un "buenrollismo" sospechoso para el clima violento que dinamita este deporte. Quizás vieron en el cielo de Anfield la clasificación actual de Liga. En el Atleti ya no está el Kun, pero en el Liverpool sigue Gerrard. Una enorme injusticia sería que el mejor pasador por raso de la historia no ganara la Premier. Esperemos que los altos cargos que se ocultan entre las nubes nos oigan. El Liverpool debe ganar el campeonato porque es el equipo con la afición que más y mejor canta, incluso supera las acciones defensivas del hermano adoptado de Yaya Touré. Porque tiene al mejor jugador de su liga, el delantero más completo del planeta, por ti, Suárez. Por Henderson, el llegador inglés que aniquila redes apareciendo de incógnito, gracias a la nueva demarcación de mediocentro puro de Gerrard. Por Sterling, que representa al pueblo jamaicano en cada sprint y arrancada eléctrica; al que su profesor de reformatorio le avanzó que a los 17 años estaría en la cárcel o debutando con Inglaterra. Lo hizo a los 18. Por Sturridge, el chico de oro del Chelsea que enigmáticamente partió a Liverpool a comerse el mundo. Y lo ha conseguido. Por Coutinho y su conducción fantasiosa. Por Brendan, que ilusiona y ofrece libertad a sus jugadores. Por Skrtel y todos los "hairless" del mundo. Y por ti Gerrard, el símbolo y el emblema, la nobleza y el honor, levantaréis el título.
